domingo, 20 de enero de 2013

CUMPLEAÑOS FELIZ EN ... TARAZONA


Hoy es el cumpleaños del papá de Sara.

Sus chicas le han venido a despertar por la mañana. Le habían preparado una fiesta de cumpleaños con decoración, con regalos y cantando happy birthday to you.

Como la ciclogénesis explosiva por estas zonas ha pasado de puntillas y sin hacer ruido, decidimos irnos a pasar el día fuera. Fuimos a Tarazona, a los pies de un nevado Moncayo cubierto de nubes, mientras el cierzo barría las que no quedaban atrapadas bajo el influjo magnético de esta increíble montaña.


COMO LLEGAR

Decidimos ir por Pedrola y Borja, pasando por Magallón. A la vuelta hicimos igual pero pasando por Pozuelo, una carretera muy tranquila y en muy buen estado. Se llega en menos de una hora. El objetivo era la catedral gótica del s. XII, abierta al público desde hace un par de años, tras 20 cerrada por restauraciones.

EL LUGAR

La catedral extramuros se edificó sobre una antigua visigótica, sobre la que se comenzó a construir una románica tras la reconquista de Alfonso I en 1119. La gótica comenzó a construirse poco después en el S XIII por maestros franceses siguiendo las líneas más ortodoxas del gótico de la época.

No obstante, la catedral es el conjunto de una serie de influencias estilísticas a lo largo de su historia: renacentista, barroca y, sobretodo, mudéjar en el cimborrio, el remate superior y la torre. La restauración ha devuelto este expléndido edificio a su esplendor pasado.

Tras comer por todo lo alto...

... dimos una vuelta por la parte antigua de la ciudad que guarda como joyas el ayuntamiento, la iglesia mudéjar de Sta Mª Magdalena con ábside románico del s XII, de la que destaca su esbelta torre mudéjar, y el palacio arzobispal. Son de destacar también las casas colgantes y la judería.

LOS ALREDEDORES

La sierra del Moncayo, que ya hemos visitado en otras ocasiones, tiene rincones estupendos como el monasterio de Veruela, el santuario del Moncayo, el castillo de Trasmoz, así como preciosos pueblos como Añón o Vera. Nos queda pendiente la visita a Torrellas, al parque de los Lombacos. Eso será otro día. Por hoy, Sara ya ha tenido bastantes sensaciones y se quedó dormida todo el viaje de vuelta.