martes, 12 de noviembre de 2013

Un paseo por Ordesa

Este fue un bonito fin de semana en familia, con los primos y los tíos. Desde el diminuto pueblecito de Viu fuimos a Ordesa e hicimos un pequeño paseo por la parte baja del valle que nos encantó a grandes y a chicos.

COMO LLEGAR.
Antes no había más tutía que ir por el Cotefablo, preciosa carretera de curvas donde no cabe ni una más. Ahora se puede también acceder desde Sabiñánigo por el puerto de Yebra de Basa hasta Fiscal, y de ahí a Broto para subir luego hasta Viu. Son 2 horas y la carretera no es tan mala. Casi es peor el Monrepós y las interminables obras paradas.

EL LUGAR.
En estas fechas de Noviembre, el Otoño está muy avanzado en alturas por encima de los 1000 m. La variedad de los bosques garantiza unos contrastes maravilloso, pasando del amarillo al ocre, y el tenaz verde.

Ahora se puede subir a la pradera en coche, pero el valle glaciar es tan profundo que ya hace días qeu el sol no entra en la parte baja, lo que permite que la humedad perdure y las temperaturas arriba no superen los 10º en todo el día.

Los chicos se portaron muy bien. Sara caminó todo el camino de ida hasta que no pudo más, y se durmió en la mochila. Al llegar del paseo comimos bien y nos calentamos en el bar con cafés y batidos de chocolate.

LOS ALREDEDORES.
Nuestra casa estaba en Viu en pleno campo. Eso permitió que los chicos disfrutaran de lo lindo con los ternericos, con las ovejas, con las cabras y los cabritillos, con los perritos pastores y los gatitos,....

También dimos un breve paseo hasta encontrar un antiguo camino rústicamente empedrado que subía de un pueblo para dar acceso a las diferentes fincas de trabajo a lo largo de la ladera de la montaña.

Nos hizo un tiempo mu ybueno y los chicos disfrutaron de los lindo.

Y colorin colorado este fin de semana ya se ha pasado

domingo, 20 de octubre de 2013

Un paseo por el galacho de Juslibol

Tras pasar la noche lloviendo se levantó un día estupendo, sin viento, sin frío, sin calor,.... perfecto para un día de campo.

Pero como nos levantamos tarde no queríamos ir muy lejos. Qué mejor sitio que el humedal del Galacho de Juslibol, antiguo meandro del río cuyo cauce abandonó el río el año 1961 cuando una gran riada enderezó el curso del río dejando este maravilloso remanso de paz, para los paseantes, y para la variada fauna que se cobija en los carrizales, tamarizales y en los sotos de ribera.



COMO LLEGAR.
Pues camino a Juslibol, el "Deus o vol" de las huestes de Alfonso I al lanzarse desde estos altos a la conquista de la musulmana Saraqusta. Para no perdernos, cogimos el tren del parque, que te lleva desde el Actur hasta el centro de interpretación del parque. A partir de ahí, solo hay que pasear, en bici, andando, corriendo, a caballo,... Nosotros fuimos andando.

EL LUGAR.
Por un lado cerrado por los blancos paredones rocosos escabados por el río, por el otro cerrado por el nuevo cauce del Ebro. Entre medio, los antiguos brazos de río cubiertos por carrizales, que van recibiendo aportes de las diferentes crecidas invernales. Los árboles y tamarizales ocupan su lugar dependiendo de las necesidades de agua y de la resistencia a las inundaciones.en un continuo cambio. Las aves migratorias hacen su parada aquí, aunque esta no era la época.

Sara disfrutó mucho, correteando, recogiendo palitos, dibujando en el barro, mirando por los prismáticos,... solo hay que verla. Y nosotros también con ella.

LOS ALREDEDORES.
Recorridos muchas veces en bici años ha, es bonito acercarse hasta la cercana Alfocea y cruzar el puente hacia Monzalbarba. Subir al mirador del castillo de Miranda te permite ver los dos mundos, uno verde y acogedor hacia el valle, otro hinóspito y agreste hacia el infinito desierto. Las vistas del Galacho y de la ciudad de Zaragoza son muy bonitas desde aquí.

Hasta otra.

domingo, 13 de octubre de 2013

OFRENDA DEL PILAR 2013

Otro año más llegó la ofrenda del Pilar. Allí fuimos ataviados con nuestros trajes regionales a llevar flores a la Virgen. Es la segunda ofrenda de Sara, la quinta de papa, y la incontable de mama, que es la que más experiencia tiene en este tipo de actos multitudinarios.

La novedad este año fue el tiempo. Este año no llovió, pero ni siquiera hizo frío (cosa que se preveía tras el cierzo de los dos días anteriores, que presagiaba un intenso frío), ni tampoco calor. De estos días que ni frío ni calor hay cuatro en todo el año, y uno fue el día del Pilar. Aún así, amanecimos con 7 graditos, es decir, fresco, y almediodía hacía casi 20, es decir, calorcito.
















Así fuimos a ver a la yaya...
y a la prima Elisa y a los tíos Maikel y Pilu, con los que conseguimos sortear todos los obstáculos, llegar a la zona 0, depositar los ramos, y volver a almorzar un suculento aperitivo ribagorzano.


Este año Sara fue más consciente de todo, y de tan nerviosa que estaba, se agotó y a lo que nos llegó la hora de entregar los ramos, era un trapito a los brazos de papa. Aún así, aguantó como una campeona, y se revolvió todo lo que pudo antes de caer dormida ya sobre las 5 de la tarde. Aún nos dió tiempo de dar un paseo, y ver un concierto de música moderna tocada con violines, violoncelo, flautas y clarinetes, que sonaba la mar de bien. Después vimos los fuegos y ya para casa, que había sido un intenso día.

Al año que viene más, y traje nuevo para Sara que no para de crecer.

Un abrazo a nuestros pacientes seguidores.

jueves, 12 de septiembre de 2013

Camino Soria

Debemos confesarnos apasionados de esta provincia, llena de naturaleza, inmensos pinares grandiosos, de clima extremo, de gran altitud, lugar de nacimiento de buena cantidad de los ríos que vierten al valle o bajan a la meseta, y lleno de pequeños pueblecitos, monumentos todos ellos, que atestiguan una pasada grandeza. Todo eso es Soria. Hemos hecho otros viajes por Soria capital y el Duero, Agreda y sus puertas califales, Almazán y sus murallas, Berlanga de Duero y su gran castillo, San Baudelio y sus pinturas,... Este año decidimos ver el centro y Suroeste de la provincia. Y lo disfrutamos a tope.

COMO LLEGAR.

Pues hay muchos caminos a Soria pero el más habitual es por Tarazona y el Moncayo. El problema es que la carretera es mala, pese al recién arreglado puerto de las Lanzas, y con mucho tráfico. Así que decidimos ir por Calatayud, y luego subir por el valle del río Ribota. Paramos a comer en Villaroya de la Sierra, antes de llegar a la provincia de Soria. El pueblo nos sorprendió por los restos de las dos fortificaciones que hay en cada una de las lomas que presiden la localidad, una se llama castillo del Rey, donde se conserva la torre del homenaje, y el de enfrente, donde hubo una fortificación árabe, el castillo de la Reina.

Tras pasar Soria, cogimos la carretera de Burgos hasta Abejar, allí cogimos el desvio al pantano de Cuerda del Pozo, entre medio de inmensos y magníficos pinares, la mayor reserva de la península. El agua estaba fresca pero Sara y yo nos bañamos. Sara luego no quería salir.

EL LUGAR.

Deberíamos hablar de los lugares que fuimos a ver durante los días siguientes:
LA FUENTONA. Espacio protegido donde una surgencia natural de un acuifero subterráneo da lugar al nacimiento del río Abión. El lugar es precioso pero el paseo hasta allí también merece la pena pese a a falta de agua en esta época del año.

EL SABINAR DE CALATAÑAZOR. En los suelos más pobres y calizos se concentran los mejores sabinares de España, y por tanto, del mundo. Este austero árbol del Terciario siempre ha sido muy valorado por su resistencia y su durabiidad. Había ejemplares enormes.

CALATAÑAZOR. El pueblo es minúsculo pero en su reducido espacio interior a a murallas se conservan los restos de un castillo con su torre del homenaje,una iglesia románico-gótica, bellos ejemplos de arquitectura tradiciona basada en bases de piedra, estructuras de sabina y relleno de tapial o de adobe. Es como si el tiempo no hubiese avanzado desde el siglo XIV.

EL BURGO DE OSMA. La ciudad de Osma empezó con la construcción de la catedral románica, que sustituía la destruida basílica visigótica de Osma (Oxama), en las cercanías. De la catedral románica solo queda una preciosa sala capitular con la tumbra de Pedro de Osma, promotor de la misma, donde se conserva toda la policromía en la piedra.

Poco duró esta catedral al sustituirse por una gótica, que es la que se conserva, con importantes añadidos renacentistas y barrocos. La vida de la ciudad ha circulado en torno a esta importante sede episcopal. La Universidad de Santa Catalina, del s XVI ha sido convertida en un precioso hotel de lujo, alrededor de cuyo claustro de piedra tallada se disponene las habitaciones.

Este fue nuestro hotel de lujo.

CAÑON DEL RIO LOBOS. El río Lobos, ha excavado un impresionante cañón en la roca caliza de 24 kms desde su nacimiento en la provincia de Burgos a Ucero en Soria, donde vuelve a emerger convertido ya en el río Ucero.

Hicimos un pequeño paseo hasta la ermita tardo románica de San Bartolomé, que ya incorpora muchas soluciones y detalles góticos, en un marco de belleza incomparable.



GORMAZ. La pequeña aldea de Gormaz esconde dos maravillas en las laderas de la montaña a los pies del Duero; por una parte la iglesia de románico primitivo de S. Miguel de Gormaz, de ábside cuadrado, galería porticada al sur y unas estupendas pinturas románicas del s XI que se conservaban tras varias capas de cal en bastante buen estado.

Por otra, la fortaleza califal de Gormaz, en la cima del monte que controla el Duero, edificada en el siglo IX y cuyo alcázar fue reformado en siglos posteriores.

SAN ESTEBAN DE GORMAZ. Un poco más abajo del curso del Duero aparece esta localidad que esconde dos joyas del románico también. Las dos en colinas altas, y con galerías porticadas con preciosos arcos y capiteles, aunque algo deteriorados según la calidad de la caliza con la que fueron labrados.

Unas fotos hablan mejor que muchas palabras.

LOS ALREDEDORES.

Pues aún nos quedan muchas maravillas que descubrir de esta provincia. Para otra vez dejamos el norte, las sierras de Cebollera y Urbión, y las zonas altas de la provincia. Una maravilla desconcertante a descubrir.

Y  colorin colorado esta historia se ha acabado (de momento).

viernes, 30 de agosto de 2013

Acueductos romanos y otras atracciones en Teruel

La provincia de Teruel tiene de todo. Como bellas casonas renacentistas en preciosos pueblos apartados al pie de las montañas, como esta del Poyo del Cid, localidad a 900 m de altura, a orillas del río Jiloca y en la comarca del mismo nombre, mencionada en el Cantar del Mio Cid hace 1000 años.


Desde este idílico lugar decidimos ir a Albarracín para ver algún tramo recuperado el antiguo acueducto romano que llevaba agua de la parte alta del río Guadalaviar, de vertiente mediterránea, a la localidad de Cella, de vertiente al valle del Ebro, donde el agua debía ser menos escasa e insuficiente para abastecer una ciudad importante en población. De aquella ciudad no queda nada pero sí se sabe por donde discurrió el acueducto de 24 kms que salvaba un abrupto terreno manteniendo un 2% - 3% de pendiente constante para permitir la caída del agua.

Hay 8 tramos que han sido recientemente restaurados, de los que visitamos dos, en los alrededores de la localidad de Gea de Albarracín. Los tramos se encuentran algo alejados pero muy accesibles por pistas en buen estado. Sara camino todo el camino de ida y de vuelta, para lo que hubo que amenizar el camino con canciones y cuentos.


Los tramos que se conservan fueron excavados por la roca mediante el procedimiento de pozos o simas cada 100 metros, que servían como respiradero y por donde evacuaban los escombros. La mayoría de ellos están saturados como el que se muestra a continuación.


Las galerías son bajas, pero permiten el paso de una persona para facilitar las labores de mantenimiento y limpieza. En algún trozo se hacen oscuras, pero Sara dijo que quería seguir, y no soltó su linterna ni un momento. Estaba nerviosa pero disfrutaba. Su risilla cómplice la delata. Como veis, entramos los 4, incluyendo el bebé de Sara. No lo íbamos a dejar solo a la entrada.


Luego un ratito de columpios y toboganes en Gea....


Y fuimos a ver otro tramo. Esta vez el acueducto sorteaba el abrupto barranco de los burros, de una belleza paisajística excepcional. Los ingenieros romanos podían haber optado por un puente acueducto que salvara el barranco en línea recta, ya que se trata de un barranco seco, pero las fuertes torrenteras esporádicas hubieran supuesto importantes gastos de reconstrucción y mantenimiento, por lo que optaron por la más costosa pero segura opción de bordear todo el barranco. Esta vex, en vez de hoyas superiores, el desescombro se hacía por ventanales a un lado del acueducto.



LOS ALREDEDORES
A continuación nos fuimos a Cella, donde existe una pozo artesiano que da salida a los caudales de agua filtrados por la caliza de la sierra de Albarracín  y del alto Tajo. Su caudal medio ronda los 700 l / seg. pero sus picos son de 2000 - 3000 l/seg. Da nacimiento al río Jiloca. La fuente, diseñada en el s. XIX por un arquitecto italiano, estaba a rebosar.


 Y aún no había acabado la fiesta. Fuimos a las fiestas de Santa Eulalia, donde el pueblo parecía un pueblo fantasma porque no había nadie por las calles. Estaban todos de picnic en la ermita cercana, en la vega del río, entre arboles y campos. Acabamos en Monreal, también de fiestas, donde había un espectáculo paar niños que hizo las delicias de Sara.




Y colorín colorado, esta historia también se ha acabado. Pronto volvemos con más.