Nuestras vacaciones por la Cerdanya

Hola amigos de Sara (y familia).

Esta vez os vamos a contar las vacaciones de Sara y su familia por la comarca catalana de la Cerdanya, comarca transfronteriza que abarca el valle del alto Segre, en sus términos de Lleida, Girona y Francia.

COMO LLEGAR

Pues curvas no faltan pero la carretera es buena. En Lleida tomas la carretera de Balaguer en dirección la Seu. 150 kms después llegamos a nuestro camping en la localidad de Prullans, un precioso pueblecito de montaña pero bien comunicado.

EL LUGAR

La Cerdanaya es un paraíso natural de suaves relieves, pero con importantes cotas. El valle está rodeado de montañas que se acercan a los 3000 m. Los más impresionantes son los murallones calizos de la cara norte del Cadí, como los que se ven desde la pradera cercana a a Estana en la foto.

El Camping era un sitio tranquilo, bien equipado e ideal para descansar. Enseguida nos instalamos en nuestro bungalow para ver el partido en el que España volvió a revalidar su campeonato de Europa. Nos alegramos mucho aunque no parecía estar la gente muy animada por la zona. El bungalow era chiquitito pero tenía su jardín, su barbacoa, su parking, y por dentro era luminoso y confortable.

LOS ALREDEDORES.

No te los acabas en una semana. Os resumimos los principales.

Lagos de Malniu, a 2200 m de altura, cercanos a la localidad de Meranges, las montañas del fondo son frontera con Andorra.

Puigcerda, es una ciudad fronteriza que se ha convertido en un gran centro turístico, sobre todo para los amantes del ski por la proximidad de varias estaciones en Girona y Francia, bien comunicadas con Barcelona por los túneles del Cadi. El lago que hay también es muy bonito.

Parc Animalier d' Anglet, en Francia, justo donde comienza la comarca del Conflent, que baja hasta Perpignan. El parque está a 1800 m de altura, a los pies de una estación invernal, y contiene una buena muestra de animales pasados y presentes de los montes pirenaicos. Sara se lo pasó en grande viendo cabras, gamos, sarrios, bisontes, marmotas, ciervos, renos y hasta osos (teddies para Sara).

Bellver de Cerdanya es otro pueblo justo donde acaba Lleida, que merece la pena ver. Tiene los restos de su antigua muralla y su parte vieja está construida sobre una roca a orillas del Segre.

Llivia es un enclave gironi curioso porque todo su término municipal está en territorio francés.

Y colorin colorado, estas vacaciones se han acabado. Hasta muy pronto, espero.